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BSE (4) - Factor II - La población mundial crece en número de personas

El crecimiento demográfico es un hecho incontestable. La realidad, es que desde que se tienen series anuales históricas de la población mundial, esta ha crecido todos los años con una tasa de un 0.85% anual en el período de 1900 a 1950 que sube hasta una tasa del 1.78% en el período 1950 a 2000[i]. Durante el período de 2000 hasta 2022 esta tasa está oscilando hacia un 1.65% anual.

Como podemos observar, los datos son definitivamente esclarecedores, por más proyecciones que se hagan optimistas, incluso de tasas negativas en los próximos años, nada indica que estas tasas negativas puedan llegarse a producir durante lo que resta del siglo XXI.



La realidad es que la velocidad de crecimiento de la población mundial está avanzando de forma
abrumadora. La tabla adjunta muestra los años en que se asumieron desde los mil millones de habitantes hasta los 8.000 millones actuales, y vemos que de forma continuada el intervalo de crecimiento de cada 1.000 millones es mas corto. Así para pasar de 1.000 a 2.000 millones se demoraron 119 años, sin embargo, para ganar los 1.000 millones que van de 7.000 a 8.000 millones de habitantes solo se han tardado nueve (9) años.


Existen previsiones[ii] que indican un crecimiento más lento a partir de los momentos actuales, que si tenemos como base la evolución de las últimas décadas consideramos altamente optimistas. No estamos aquí para debatir si el crecimiento será el que se proyecta desde fuentes oficiales (ONU, Banco mundial, etc.) y que hasta el fin del siglo XXI podemos resumir en la tabla adjunta complementando la anterior, o si, como es opinión del autor, estas cifras son altamente optimistas y consideramos que después de análisis propios efectuados internamente la evolución de las cifras hasta final del presente siglo se parecerá más a las que


detallamos en la tercera y última tabla:

Nótese que existen previsiones efectuadas por diferentes institutos de investigación que sitúan en el fin del siglo XXI un intervalo de población mundial que va de los 17.000 a los 19.000 millones de habitantes.

¿Por qué es importante el tamaño de la población mundial para BSE?

El consumo de energía mundial va directamente relacionado con el tamaño de la población, porque son los ciudadanos quienes consumen la energía, ya sea de forma directa o indirecta.

Directamente con sus coches, en su casa, ya sea refrigerándola o calentándola, o para preparar sus comidas, y así en tantas otras actividades y necesidades personales o familiares.

De forma indirecta también se consume energía, así utilizando cualquier tipo de transporte público, asistiendo a una plataforma digital o teniendo hospedados sus archivos profesionales en algún servidor en la nube o simplemente comprando productos manufacturados que han sido fabricados, distribuidos, comercializados consumiendo energía. También, de forma indirecta, disponer de escuelas, hospitales, ciudades en condiciones y con los servicios necesarios para atender las necesidades de los ciudadanos requiere de energía, dimensionando las capacidades de energía de acuerdo con el tamaño de la población atendida.

Por ello el consumo de energía, como veremos más adelante, va directamente vinculado al tamaño total de la población a la que se debe atender.

Conseguir controlar el crecimiento de la población mundial es un factor trascendental para mantener estabilizado el consumo de energía, reduciendo las posibilidades de un BSE.



[i] https://es.wikipedia.org/wiki/Poblaci%C3%B3n_mundial

[ii] https://www.populationpyramid.net/world/2100/ 

BSE (3) - Factor I - Las reservas y disponibilidad de combustibles fósiles se reducen

Para facilitar mejor la comprensión del problema suscitado por cada uno de los factores que inciden en el BSE, vamos a entrar en cada uno de estos factores que en el mundo Sunthereum consideramos claves.


Que son los combustibles fósiles

Las fuentes de energía que provienen de combustibles fósiles son aquellas que están compuestas por los restos fósiles descompuestos de vegetales y animales. El proceso de formación de los combustibles fósiles dura mucho tiempo, es un proceso realmente lento, pues no solo se trata de la propia descomposición, sino también de la fosilización y de diversos cambios geoquímicos.

Así, estas fuentes energéticas se extraen de la tierra y de los fondos acuáticos, pues se encuentran en diversas capas bajo tierra. Dependiendo de la profundidad y de las condiciones de la zona en concreto, podemos encontrar un tipo u otro de combustible fósil. El origen de los combustibles fósiles se considera que fue hace más de 300 millones de años, cuando gran parte del planeta estaba cubierto por bosques frondosos, sobre todo de helechos, y por pantanos. Las plantas son una gran reserva de energía química diversa y, en aquella época, las cantidades de gases como el oxígeno y el dióxido de carbono eran distintas a las actuales, lo que hizo que los fósiles de aquellas plantas fueran especialmente ricos en ciertos gases y sustancias químicas que favorecieron el proceso que ha resultado en estas fuentes energéticas actuales.

Concretamente, cualquier tipo de resto vegetal o animal se descompone, fosiliza y pasa por diversos cambios, según las presiones y temperaturas de la zona. Cuando hay restos en el suelo, estos se van cubriendo por capas de sedimentos, por lo que las presiones y temperaturas van produciendo cambios bioquímicos y geológicos en esta zona. De este modo, lo que había sido un trozo de helecho, por ejemplo, pasa a formar carbón gracias a estos cambios que se dan a lo largo de millones de años.

Vamos a ver brevemente como se formaron los tres combustibles fósiles: Petróleo, gas y carbón.

Como se formaron los combustibles fósiles

El petróleo

El origen del petróleo es uno de los fenómenos naturales más sorprendes descubiertos por los seres humanos. A modo de resumen, el proceso de formación del petróleo es el siguiente:

1.     Durante millones de años se ha ido dando la descomposición de restos orgánicos de seres vivos (tanto de animales como vegetales) que fueron quedando depositados en el lecho marino y zonas lacustres.

2.     Estos restos orgánicos quedaron enterrados bajo muchos metros de capas de tierra y rocas.

3.     La presión que estas capas ejercen fue provocando que el resultado de la descomposición en un medio sin oxígeno (anaeróbico) fuese un compuesto líquido aceitoso, viscoso, de mayor densidad que el agua y de color oscuro: el petróleo. Además, durante este tipo de proceso también aparece el gas natural.

Conocer cómo se formó el petróleo, ha permitido ir descubriendo más y más fuentes de petróleo alrededor del mundo.

El carbón

Estos son los puntos más importantes del proceso de formación del carbón:

1.     El carbón procede de restos vegetales muertos los cuales se van depositando y acumulando en zonas húmedas no muy profundas quedando cubiertos por agua.

2.     Al estar sumergidos no están en contacto con el aire, que provocaría su descomposición, y al existir esta ausencia de aire las bacterias anaeróbicas comienzan un proceso lento de descomposición.

3.     Tras un periodo largo de tiempo, millones de años, se van perdiendo ciertos elementos, como el hidrógeno, y haciéndose cada vez más rico en carbono.

4.     Al ser un proceso que dura tanto tiempo encima de los restos vegetales se van depositando una serie de sedimentos que ayudaran a mantener las condiciones anaeróbicas y a que las bacterias sigan haciendo su trabajo hasta formarse el carbón natural.

El gas natural

El gas natural es un tipo de gas que se produce de manera natural cuando grandes cantidades de materia vegetal quedan enterradas bajo tierra y permanecen así, a mucha presión, durante miles de años. Este proceso es similar al que da origen al petróleo. De hecho, es tan similar, que suele ser habitual encontrar yacimientos de petróleo y gas natural juntos, ya que, si se dan las condiciones para que exista un combustible, lo más habitual es que también se den para que exista el otro en el mismo lugar.

Este gas se puede extraer de una forma similar a como se hace con el petróleo y, aunque se compone de diferentes gases, en su mayoría, su composición está formada por metano, un gas que arde al prenderle fuego. De este modo, se trata de un gas que se puede quemar para producir energía aprovechable por el ser humano, lo que hace que se sitúe entre el resto de los combustibles fósiles, junto con el petróleo y el carbón.

La renovación (o no renovación) de los combustibles fósiles.

Por lo mencionado anteriormente es fácil deducir que el proceso de generación de los combustibles fósiles es un proceso de centenares de millones de años. Este es el ciclo que se requiere para la renovación de los combustibles fósiles.

Cuando, comúnmente, decimos que los combustibles fósiles no son fuentes de energía renovables nos referimos a que su ciclo de renovación oscila en unas magnitudes muy distintas de las requeridas por los humanos. Reiterando lo dicho anteriormente, el ciclo de consumo de TODAS las reservas de combustibles fósiles lo podemos medir en siglos, (¿400, 500 años?) mientras que el ciclo de regeneración de estos mismos combustibles se mediría en cientos de millones de años (aproximadamente 400 millones de años según estimaciones)

Disponibilidad de combustibles fósiles

Si bien las reservas de combustibles fósiles actualmente identificadas son de una magnitud que parece que sean ilimitadas, la realidad es muy distinta, así, siguiendo con los niveles de consumo de 2010, las reservas de petróleo comprobadas existentes el año 2019, representaban los recursos necesarios para 68,4 años, es decir manteniendo el ritmo de consumo de petróleo y derivados del año 2010 las reservas comprobadas permitirían disponer de estos combustibles aproximadamente hasta el año 2087[i].

¿Como debemos actuar?

La escasez de combustibles fósiles, en mayor o menor grado se producirá, si se continúan manteniendo los índices de consumo actuales, de forma progresiva durante la segunda mitad del presente siglo. Y durante el próximo siglo XXII se llegará a la desaparición de estos combustibles. Esto es lo que la realidad de las reservas y consumo actuales llevan a concluir.

Sin alarmismos, pero precisamos ser realistas. Es preciso reducir al máximo el consumo de combustibles fósiles.

Respecto al consumo de combustibles fósiles debemos, progresivamente erradicarlos de la base de generación energética, de esta forma se podrá alargar la disponibilidad de estos hasta tener desarrolladas e implantadas las alternativas energéticas (en cuanto a consumo, generación, transporte y distribución) que deben imperiosamente substituirlos. Paralelamente se disminuirán los riesgos ambientales referidos al calentamiento global, la reducción de la capa de ozono y mejora del medio ambiente en general.



[i] Reservas Comprobadas: https://www.indexmundi.com/map/?v=97&l=es                                           1,616,450,552,840 (barriles),  Consumo diario año 2010:  https://www.indexmundi.com/map/?v=91&l=es   , 64,728,068.6 (barriles por día consumidos) https://www.culturarecreacionydeporte.gov.co/es/bogotanitos/biodiverciudad/combustibles-fosiles , https://www.ecologiaverde.com/que-son-los-combustibles-fosiles-y-como-se-formaron-1349.html , https://www.ecologiaverde.com/energias-no-renovables/

. BSE (2) - Blackout Stage Energy - Actuar para reducir el riesgo de BSE

El pasado mes de octubre[i] enunciamos por primera vez el concepto de BSE como el estado al que podemos llegar si seguimos avanzando de forma irresponsable en la evolución de los factores que de forma directa inciden en el desarrollo del BSE, que podemos definir como un período de oscuridad energética (Blackout Stage Energy) caracterizado por la falta real de disponibilidad de la energía necesaria para responder a las necesidades de consumo de la humanidad.  

Ahora queremos hacer énfasis en los puntos sobre los que es IMPRESCINDIBLE actuar para evitar el riesgo de un Blackout Stage Energy.

Existen cuatro factores cuya situación y evolución va a ser la que pueda evitar que se produzca un BSE durante el presente siglo.

  • Las reservas y disponibilidad de combustibles fósiles se reducen
  • La población mundial crece en número de personas
  • Cada día se consume y por lo tanto se precisa más energía
  • Existen fuentes y formas para obtención de energía desconocidas o poco conocidas.

Si bien, evidentemente, existen muchos factores más que intervienen en la ecuación de solución a los desafíos que se presentan en el panorama de respuesta a las necesidades energéticas para el futuro en las próximas décadas, aquí vamos a entrar en los que llamamos de factores primarios, detallados anteriormente.

Factores como sustentabilidad, calentamiento global, inversiones, financiación, activos obsoletos, poder, política, devolución de deuda pública, economía en general, etc., serán actores en el futuro de la energía en las próximas décadas, mas, aunque reconociendo la importancia de todos ellos individual y colectivamente, no dejarán de ser meros actores secundarios para evitar directamente el BSE.

Sunthereum nació para, a partir de la realidad empírica, buscar y definir caminos que puedan facilitar la disponibilidad de la energía requerida para la supervivencia de los futuros sapiens que habiten el planeta Tierra.

El riesgo de que se produzca el BSE existe si no se actúa de forma efectiva e inmediata, sobre estas 4 líneas de acción, en su aparición y en su caso en la dimensión y gravedad, del BSE. Las líneas de actuación son:

  • Reducción del consumo de combustibles fósiles
  • Reducción del crecimiento demográfico
  • Desarrollo efectivo de fuentes de energía alternativas a las actuales e ilimitadas
  • Disminución del crecimiento de consumo de energía

Esta es la segunda entrada dedicada a BSE. En próximas entradas presentaremos el análisis de los cuatro factores que inciden en el BSE y posteriormente otro conjunto de entradas presentando las líneas de actuación sugeridas para evitar el BSE.



[i] https://sunthereum.blogspot.com/2022/10/bse-black-stage-energy-el-riesgo-de-no.html

Energía Colaborativa

El consumo de energía crece de forma constante, por lo que se requiere un crecimiento adecuado de la disponibilidad de esta energía. Esta es una realidad que ya hemos constatado y analizado en otros puntos de Sunthereum.

Aquí vamos a considerar el modelo de generación de energía que, mayoritariamente se está generando (y hasta hace pocos años de forma prácticamente exclusiva) de forma centralizada.

Sunthereum se centra en el desarrollo futuro de la generación en forma distribuida y con la participación del consumidor en el proceso de generación y distribución de energía.

La amenaza de la entrada en vigor de una nuevas legislaciones puede penalizar la autogeneración de energía pero se ha puesto de manifiesto la fuerza que tienen los ciudadanos para demostrar -con hechos- a las autoridades que existe un nuevo concepto que desde Sunthereum estamos convencidos que será la base de un nuevo modelo de generación y distribución de energía: Energía Colaborativa.

La despenalización, seria mejor la incentivación, de la autogeneración de energía debe ser la base para un desarrollo sustentable y responsable de la consolidación de las energías generadas de fuentes realmente renovables y verdes, que, de ninguna forma, ni directa ni indirecta perjudiquen el medio ambiente.

La Tercera Revolución Industrial y la era colaborativa

Jeremy Rifkin[i] en su visionario libro, en 2008, dice que “Las grandes revoluciones económicas de la historia se producen cuando las nuevas tecnologías de la comunicación convergen con los nuevos sistemas energéticos”. En el mismo libro también dice que “la última de las grandes Revoluciones Industriales sentará las bases de la infraestructura para una era colaborativa emergente. Nueva era marcada por el comportamiento colaborativo, las redes sociales y la fuerza laboral profesional y técnica.”

Coincidimos plenamente en la visión de futuro de la Tercera Revolución Industrial que, algo más de una década después de la publicación del libro de Jeremy Rifkin, está mostrando claramente los síntomas de que estamos plenamente en esta Tercera Revolución Industrial.

Prácticamente sin ser conscientes de ello estamos comenzando el camino de la energía colaborativa. En las dos décadas anteriores hemos consolidado la colaboración en la información y comunicación a través de las redes sociales. En esta década se consolidará la colaboración energética, entrando plenamente en el desarrollo del concepto de energía colaborativa que permitirá responder a muchos de los retos reales que tenemos los humanos para resolver en el siglo XXI.

Siguiendo con la visión de Jeremy Rifkin en la Tercera revolución industrial, algunos de los pilares de dicha revolución consisten, en la previsión de Rifkin, en transformar el parque de edificios de todos los continentes en micro centrales eléctricas para recolectar energías renovables en el propio local de consumo, otro de los pilares consiste en implementar tecnologías de almacenamiento en cada edificio y en toda la infraestructura para almacenar energía intermitente y además, usar la tecnología de Internet para transformar la red eléctrica de todos los continentes en una interred de energía compartida que actúa como Internet (Cuando millones de edificios generan una pequeña cantidad de energía localmente, en el punto de consumo, pueden vender el excedente a la red y compartir la electricidad con sus vecinos continentales).

Estamos realmente en pleno inicio de esta tercera revolución industrial y la generación de energía se está convirtiendo de forma urgente en una de las claves para la base de este nuevo estadio que viviremos, ya estamos viviendo, en las próximas décadas.

Esta visión de Jeremy Rifkin, con el aditivo de que esta generación de energía deberá mayoritariamente ser de origen solar y generada de forma compartida por los propios consumidores es la que se está implantando progresivamente, y con la evolución y consolidación de los siete pilares de Sunthereum se convertirá en la base de generación de energía para las necesidades crecientes que precisaran ser cubiertas en las próximas décadas de este siglo XXI. Esta es la era colaborativa.

Dos son los pilares base de la energía colaborativa.

Generación Distribuida

Según los datos publicados por la ANEEL[ii] (Agencia Nacional de Energía Eléctrica -de Brasil) la potencia instalada en generación distribuida en Brasil supera la potencia instalada en cualquiera de las mayores usinas centralizadas de Brasil y equivale a un 8% de toda la potencia de generación centralizada de Brasil -véanse tableas adjuntas.

Es preciso incidir en algunos puntos que son especialmente relevantes y que quedan de manifiesto en los cuadros adjuntos:

1.- Los 14,9 GW de potencia instalada en generación distribuida están siendo generados por 1,4 millones de unidades generadoras distribuido por todo el territorio de Brasil.

2.- La inversión en GD la han efectuado 1.4 millones de consumidores, con sus propios recursos y capacidad de inversión, sin ningún lastre financiero para el gobierno de Brasil, mientras que las grandes usinas han sido ejecutadas con la participación del Estado con financiación a largo plazo que deberá ser pagado por todos los contribuyentes. Algunas de estas usinas, a pesar se haber sido implantadas hace algunas décadas, aun tienen recorrido de coste financiero para el país durante varios años.

3.- La generación se produce, mayoritariamente en el propio punto de consumo y los excedentes son distribuidos en los alrededores del punto de generación, con la consecuente economía en el coste de distribución, aligeramiento de las cargas de las redes eléctricas y reducción de las pérdidas de energía (que en el caso de Brasil oscilan alrededor de un 17% de la energía generada por las usinas).

El ejemplo de los datos de generación distribuida en Brasil son una clara muestra de lo que consideramos energía colaborativa, en este caso instalada la potencia equivalente a un 25% más que la mayor usina existente en el país y todo efectuado por 1.399.415 unidades generadoras distribuidas por todo el país y con inversiones directamente efectuadas por los ciudadanos con sus propios recursos, evitando esta inversión a las arcas públicas. 

La generación distribuida, especialmente de origen fotovoltaico, está en sus fases iniciales y su desarrollo se producirá de forma que llegará a representar la mayor aportación de energía al final de este siglo. Varias son las razones, pero la más importante es la debida a la caída de los costes de producción de estos sistemas y del bajo costo de instalación. Las economías de escala, nuevos procesos productivos, nuevos materiales utilizados para la fabricación de los sistemas fotovoltaicos para su instalación distribuida, ya sea en modo local o remoto respecto del local de consumo, son los factores que nos permiten afirmar que este modelo básico de energía colaborativa será la base de la solución a los problemas de disponibilidad de energía que se presentarán en los próximos años.

Microrredes, redes virtuales inteligentes

Primeramente, veamos una definición del concepto de microrred para poder comprender lo que se estamos proponiendo:

Una microrred es una red eléctrica local con límites eléctricos definidos, que actúa como una entidad única y controlable[iii]. Es capaz de operar conectada a la red y en modo aislado[iv] [v]. Una ' microrred independiente' o ' microrred aislada' solo funciona fuera de la red y no se puede conectar a un sistema de energía eléctrica más amplio.

Si bien existen diferentes tipologías todas ellas tienen en común que su base es comunitaria, en cuanto a que son cargas interconectadas y recursos de energía distribuida dentro de límites eléctricos claramente definidos que actúan como una sola entidad controlable con respecto a la red general. Una microrred puede conectarse y desconectarse de la red para permitirle operar tanto en modo conectado como aisladamente.

 Una microrred puede comprender sistemas de distribución de bajo voltaje (LV) con recursos de energía distribuidos (DER) ( microturbinas , celdas de combustible , energía fotovoltaica (PV), etc.), dispositivos de almacenamiento ( baterías , volantes ) energía sistema de almacenamiento y cargas flexibles. Dichos sistemas pueden operar conectados o desconectados de la red principal. La operación de micro fuentes en la red puede brindar benefícios para el rendimiento general del sistema, administrada y coordinada de manera eficiente.

Las microrredes serán elementos claves en el desarrollo de la generación distribuida y en el progresivo proceso de su desvinculación de las grandes redes de transmisión de energía procedente de las grandes usinas eléctricas. Las microrredes que formarán parte como elementos complementarios de apoyo al desarrollo de la generación distribuida, permitirán entre otras cosas dotar a los sistemas distribuidos de elementos de almacenamiento de energía compartido entre colectivos de usuarios, facilitando la independencia de las redes generales, de la posible estacionalidad de la generación, la respuesta a situaciones de emergencia que puedan presentarse y en el futuro permitirán el acceso a servicios de energía de proximidad generados externamente.

Las microrredes por su propio modelo son un elemento de energía colaborativa. En el futuro inmediato vamos a acostumbrarnos a su desarrollo y difusión, formando parte del entorno próximo de la mayoría de los ciudadanos.

La idea de que la energía solar distribuida de generación variable requerirá el apoyo de la energía suministrada por las redes generales para evitar la falta de electricidad en determinados horarios se ha convertido en una especie de moderna leyenda urbana, difundida en gran medida por las empresas distribuidoras de energía. Las microrredes llegan para evitar estas problemáticas, facilitando el acceso a sistemas de almacenamiento compartido. Es la energía colaborativa! 

Obstáculos para la energía colaborativa

Varios serán, son, los obstáculos con que se encuentra la energía colaborativa en su desarrollo y que plasmamos aquí como obstáculos para los sistemas de generación distribuida y las microrredes.

El principal obstáculo para el desarrollo de la energía colaborativa, de la misma forma que acontece con otras formas de colaboración, son los poderes económicos existentes, con la fuerza del capital que únicamente están enfocados en el uso del capital para extender el poder económico. Estamos ante un obstáculo de modelo socio – económico.

Los altos niveles de beneficios económicos conseguidos por las poderosas empresas generadoras y distribuidoras de energía, con una elevadísima retribución del factor capital, que se está consiguiendo por variadas razones -básicamente especulativas- actuará, realmente ya actúa, como un elemento que por todos los medios que le son posible obstaculizan el desarrollo de modelos y tecnologías que apoderen a los ciudadanos en detrimento de la dependencia de sus productos y servicios. Pero esta situación no se podrá soportar por muchas décadas puesto que como decimos en otros documentos las fuentes fósiles son limitadas y no podemos vivir en un modelo de sociedad de crecimiento ilimitado si no se abren las puertas a acceder a modelos que permitan un mayor crecimiento.

La obsolescencia de activos, este será uno de los grandes obstáculos de la energía colaborativa. Las grandes inversiones que se han hecho y que, incomprensiblemente, en la actualidad se siguen haciendo por parte de gobiernos y grandes empresas en infraestructuras que quedaran tecnológicamente obsoletas mucho antes de su total amortización, convirtiéndose rápidamente en pasivos. Estamos asistiendo al fenómeno de lo que Joseph Shumpeter denominó de “destrucción creativa”, porqué el valor de dichos activos se reduce y estos rápidamente deben ser desplazados de la columna de activos a  la de pasivos. Este es un gran cambio de paradigma que crea un gran obstáculo en la implantación y evolución de nuevos modelos que basados en la tecnología inciden en los usos y costumbres de los usuarios.  

Conclusión

Como dice Jeremy Rifkin, “La economía compartida es un aspecto central del Green New Deal”. La economía colaborativa está ahora en su infancia y evolucionará en muchas direcciones, una de ellas en la “energía colaborativa”.

El fenómeno de la energía colaborativa como parte de la economía colaborativa, es posible gracias a la infraestructura digital, de energía y de movilidad que están cambiando los fundamentos de la actividad económica. Y como dice Jeremy Rifkin, “se trata del nuevo sistema que llega al escenario mundial desde el capitalismo y el socialismo en los siglos XVIII y  XIX”. 

Hemos mostrado el ejemplo de Brasil, que en menos de cuatro años ha desarrollado mas del 95% de su base de sistemas de generación distribuida, estos datos probablemente reduzcan su crecimiento porque se ha aprobado una ley restrictiva para compensar la reducción de beneficios de las grandes empresas multinacionales que dominan la generación y distribución de energía.

Esperamos que sean muchos los gobernantes y legisladores que tomen conciencia de que el sector energético no es más un sector y ahora hay que considerarlo como un factor clave en el desarrollo de los modelos sociales y económicos para los próximos siglos.

Estos datos, seguro son para hacer reflexionar a los ciudadanos respecto del camino que de forma irreversible está siguiendo la generación de energía. Esperamos que esta materia ayude a reflexionar a muchos responsables políticos, sociales y empresariales sobre los caminos que debemos seguir para no colapsar el progreso mundial. 



[i] TheThird Industrial Revolution, Jeremy Rifkin

[ii] Empreendimentos de Geração Distribuida (31.10.2022) https://dadosabertos.aneel.gov.br/pt_BR/dataset/relacao-de-empreendimentos-de-geracao-distribuida e dados do SIGA - Sistema de Informações de Geração da ANEEL – geração centralizada- (31.10.2022) https://dadosabertos.aneel.gov.br/pt_BR/dataset/siga-sistema-de-informacoes-de-geracao-da-aneel

[iv] How Microgrids Work. U.S. Department of Energy, June 2014

[v] "microgrid"Electropedia. International Electrotechnical Commission. 2017-12-15. group of interconnected loads and distributed energy resources with defined electrical boundaries forming a local electric power system at distribution voltage levels, that acts as a single controllable entity and is able to operate in either grid-connected or island mode


BSE (1) – Blackout Stage Energy, el riesgo de no anticiparnos

Existe la posibilidad de que los Sapiens, que todo lo dominamos y controlamos, en un alarde de autosuficiencia, sigamos sin trabajar para solucionar el gran problema real que puede acontecer en la segunda mitad del Siglo XXI, el Blackout Stage Energy que identificamos BSE, o la fase de falta de energía suficiente para dar respuesta a las necesidades requeridas. Los humanos desde el inicio de la Primera Revolución Industrial a finales del Siglo XVIII hasta la actualidad hemos incrementado constantemente el consumo de energía per cápita y consecuentemente, asociado al incremento demográfico, el consumo de energía globalmente.

No solo se ha incrementado la necesidad de energía para el consumo cotidiano, sino que esta necesidad de energía cada día es más imprescindible para dar respuesta a las necesidades complementarias que el desarrollo tecnológico nos facilita. Así precisamos de energía para muchas mas actividades que en décadas pasadas, con una mayor dependencia de la disponibilidad de energía. Así actual y progresivamente esta dependencia se está convirtiendo en un factor crítico para la vida y la convivencia.

El BSE es un período en el cual, en que caso de no ser previsores y aplicar nuevos modelos energéticos como los definidos en Sunthereum, puede faltar energía suficiente para dar respuesta a las necesidades de los humanos. Éste puede ser un período que puede llegar a prolongarse durante décadas y que  se caracterizaría por la necesidad de restringir el uso de energía.

No pretendemos ser alarmistas, pero sí generar una conciencia activa de la situación que podría llegar a producirse en la segunda mitad del presente siglo. Únicamente con esta plena conciencia de la situación real se conseguirá tomar medidas para mitigar y/o evitar esta situación que llevaría al BSE.

Véase que en este punto estamos refiriéndonos exclusivamente a la necesidad de soluciones en su aspecto operacional, no estamos refiriéndonos a los aspectos de tipo ambiental y económico a los que también auguramos muchos cambios en sus respectivos modelos para poder adaptar la vida en nuestro planeta -y donde corresponda- en el futuro.

Veamos el porqué del riesgo de llegar a un BSE si no se desarrolla, implanta y aplica urgentemente Sunthereum.[i]

Los combustibles fósiles fueron generados por la naturaleza en un período de más de cuatrocientos


millones de años. Desde el inicio de la revolución industrial se produjo el consumo de los mismos, es decir hasta el momento presente hablamos de menos de tres siglos. Dada su naturaleza fósil no se puede pensar en una regeneración en menos de algunos cientos de millones de años. 

Las reservas -limitadas y progresivamente mas costosas de extraer- se reducen progresivamente tendiendo a cero. Esto conduce a la necesidad de obtener fuentes de energía alternativas pues las proyecciones existentes llevan a concluir que al final del presente siglo XXI las reservas se habrán extinguido o estarán a pocas décadas de hacerlo,  

Las necesidades de energía a nivel global crecen por dos grandes razones primarias:


·       El crecimiento demográfico
·       El incremento de consumo de energía per cápita

Las proyecciones efectuadas por el Banco Mundial, la ONU, la Agencia Internacional de la Energía y diversos institutos de referencia indican que estas dos variables seguirán creciendo de forma continuada en las próximas décadas y en consecuencia el crecimiento de las necesidades de energía también.

Únicamente la reducción del crecimiento de ambos factores puede amortiguar el crecimiento de las necesidades de energía. En cualquier caso, una cosa es cierta, la necesidad de energía seguirá creciendo.

En el inicio de la década de los 20 existe la conciencia, por parte de expertos y administraciones públicas, de que la necesidad de crear alternativas a las fuentes de energía actualmente en explotación

es real. Nadie, ningún responsable político de países u organizaciones supranacionales explicita que

esta necesidad se debe a la falta de previsión y a la constante irresponsabilidad creada a partir de intereses económicos de muy bajo estilo, favoreciendo la especulación y el dominio de la evolución por parte de grandes grupos que normalmente miran hacia la cuenta de resultados, los valores de las empresas en bolsa y los réditos políticos para mantener el poder.

De forma ficticia se ha llegado a la situación de que la Comunicad Europea califica la energía nuclear -junto con el gas- como “verde”[i], sin considerar, por ejemplo, el problema suscitado por los residuos nucleares generados por las centrales de este tipo en operación.

Entendemos que el desespero es importante, aunque de forma explícita no se ha denunciado nunca.

Ahora estamos ante la moda de reforzar el “hidrogeno verde”, cuando, por ejemplo, no se está en condiciones de valorar la cantidad de energía requerida para la generación de dicho combustible.

Una vez más se está ante la sumisión de los intereses globales de la humanidad frente a los intereses de determinados grupos o colectivos económicos dominantes.

Es claro que ni la energía nuclear ni el hidrogeno verde serán la solución para las necesidades futuras de energía que se requieren para la supervivencia de la humanidad en condiciones válidas.

La única energía existente verde e ilimitada que existe, sin límites cuantitativos razonables, en la naturaleza es la energía solar. Aunque para poder disponer de ella de forma ilimitada y sin restricciones precisamos evolucionar a su explotación fuera de la propia superficie de la tierra, generándola en el espacio y transmitiéndola a la Tierra para su consumo. Obviamente se precisa de la tecnología adecuada para ello. Tecnología que de forma continua está siendo desarrollada por países o incluso empresas orientándose a la búsqueda de soluciones para el final del presente siglo y los siglos venideros.


Aquí, como sugería Stephen Hawking la solución definitiva hay que buscarla en el espacio, en la energía solar y posteriormente en la energía positiva emitida por los “agujeros negros” constituyendo lo que es conocido como “radiación Hawking”.

Este es el camino y los pasos para avanzar en este camino precisamos comenzar a darlos de forma inmediata y urgente.

Denominamos BSE a la Fase de Apagón de Energía (Blackout Stage Energy) que podría llegar a producirse en la segunda mitad del siglo XXI si no se consiguen corregir las cuatro variables:

  • Reducción del consumo de combustibles fósiles
  • Reducción del crecimiento demográfico
  • Desarrollo efectivo de fuentes de energía renovables alternativas a las actuales e ilimitadas
  • Disminución del crecimiento de consumo de energía

La no consecución de actuar en las cuatro grandes variables


producirá un BSE de duración y consecuencias de todo tipo imprevisibles, pues nos encontraríamos en una situación de necesidad de energía para dar respuesta a las necesidades primarias mas elementales, afectando a todos los ciudadanos.

Pero también podríamos encontrarnos en que no pudiéramos utilizar los avances tecnológicos que se han desarrollado, por falta de energía.

Este escenario de BSE no necesariamente va a producirse, pero es imprescindible que la sociedad mundial sea consciente de este riesgo, que es real.



[i] https://elperiodicodelaenergia.com/ue-clasifica-verdes-inversiones-gas-nuclear-verdes/#:~:text=La%20UE%20adopta%20definitivamente%20clasificar%20como%20verdes%20las%20inversiones%20en%20gas%20y%20nuclear,-El%20reglamento%20de  




Cambio de paradigma

 Desde el inicio de la generalización de su uso, en los siglos XIX y XX, la energía eléctrica se ha convertido en un bien necesario para la humanidad. Existen colectivos que la necesitan para poder dar respuesta a necesidades básicas de supervivencia, pero la gran masa de los humanos precisamos de la energía eléctrica para la industria que produce bienes y servicios, para el comercio y para las actividades cotidianas de todo tipo.

La evolución de las TIC está contribuyendo a mayores requerimientos de niveles de consumo de energía. Este incremento en la demanda se ve coincidiendo en el tiempo con las restricciones imprescindibles de consumo de las fuentes fósiles que están perjudicando claramente el medio ambiente.

Los Sapiens no podemos seguir siendo destructivos con nuestro propio hábitat, por el contrario, precisamos comenzar a aplicar soluciones que la propia tecnología y el universo nos proporcionan, especialmente en base a la proliferación de energía por medio de fuentes renovables, así podemos disponer de fuentes de energía eólica, biomasa, fotovoltaica, hidráulica, entre otras como base alternativa para la generación de la energía necesaria.

Para ello precisamos proyectar el desarrollo de nuestra civilización más allá de una generación. En el último siglo la velocidad de la evolución nos ha llevado a buscar soluciones siempre de corto plazo, entendiendo como corto plazo en este entorno períodos de 10 o 20 años, en lo que se refiere a energía precisamos planear el futuro a 50 o 100 años mínimo, porque caso contrario llegará un punto en el tiempo en el que la capacidad de improvisación no permitirá seguir avanzando ante el colapso climático, demográfico, tecnológico y energético.

Es en este punto que precisamos definir un nuevo paradigma que permita la “sustentabilidad” de nuestro hábitat. Hoy la propia tecnología nos permite acceder y vislumbrar opciones válidas para nuestro objetivo. Aquí es donde aparece SUNTHEREUM.

Los ciudadanos mandan

Muchos son y serán los intereses de empresas, corporaciones, inversores, autarquías, estados y organizaciones internacionales que intentan conducir y asegurar sus intereses -normalmente cortoplacistas- con especial énfasis en mantener los estatus conseguidos por diferentes medios durante décadas, muchas veces, con esfuerzos para el desarrollo del sector eléctrico en todas sus áreas.

Pero con gran diferencia, para el desarrollo de las nuevas formas de generación de energía, serán los ciudadanos quienes van a tomar el máximo protagonismo en el proceso, tal como viene aconteciendo con las TIC.

Este protagonismo tiene diferentes ópticas:

·       La primera es la presión ambiental, para que la generación de energía se lleve a cabo de forma que se pueda restringir, limitar y si es posible disminuir la contaminación atmosférica que perjudica el medio ambiente, fortaleciendo las opciones para las energías generadas a través de fuentes renovables y que en la mayor parte de su ciclo sean respetuosas con el medio ambiente.

·       La segunda es la participación en la generación de energía, de la misma forma que aconteció con las TIC el protagonismo lo tienen los ciudadanos, así los ciudadanos participaran de forma progresiva como generadores de la energía que consuman. Esto no solo es un derecho, es y será también un deber de los ciudadanos para con la conservación del planeta y la viabilidad de proyectos con energías renovables y sus diferentes formas de generación, transmisión, almacenamiento, distribución y consumo.

Así, además de exigir de las autoridades y gobiernos la creación de políticas conservadoras, deberán comprometerse personalmente, en la medida de sus posibilidades, con contribuciones de diferentes tipos en este proceso que en esta década de la energía va a consolidarse.

¿Porque ahora?

La evolución de la población mundial con unas proyecciones de crecimiento que llevan al año 2100 con aproximadamente entre los 15.000 y los 20.000 millones de habitantes basados en las previsiones de crecimiento dados por el banco mundial[i], así mismo el crecimiento continuado de las necesidades de consumo de energía eléctrica va a aproximar el consumo per cápita a más de 5.700 kWh[ii] per cápita.


Figura 1 Evolución de la población vs evolución consumo de energia hasta 2100

En el gráfico adjunto puede apreciarse claramente la evolución demográfica y el consumo estimado proyectado hasta el año 2100.

Un dato adicional, durante el año de 2019 se ha producido el sobrepaso del coste de watt generado por energías no renovables por encima de las renovables, especialmente la fotovoltaica.

Independientemente de entrar en el análisis detallado de las cifras que sustentan este estudio, que no vamos a analizar, se puede apreciar la tendencia a gran crecimiento de las necesidades de energía en el corto plazo.

Aparte de situaciones regulatorias estratégicas a corto plazo en diferentes países, es obvio que se precisan tomar decisiones para poder absorber las necesidades de energía que tendrán los ciudadanos que habiten nuestro planeta. Si la estimación es que la población mundial se habrá duplicado a finales del presente siglo XXI y casi triplicado en los albores del siglo XXII, las necesidades de energía que consumirán estos ciudadanos equivaldrán aproximadamente a cinco veces el consumo del año 2019.

“Asumiendo que la especie humana actúa para sobrevivir, viendo el momento particular de la evolución de la civilización humana, quedo maravillado pensando como las futuras generaciones van a hacerlo para sobrevivir 50.000 años más a partir de ahora. Probablemente, si consiguen sobrevivir, nos caracterizarán como la era del combustible Fósil y del Carbón, de la misma forma que nosotros nos referimos a la edad de Bronce y de Hierro”[iii].

Las soluciones para dar respuesta a estas necesidades de generación de energía no pueden esperar a ser diseñadas e implantadas cuando ya no sean posibles respuestas efectivas. Ahora y no más tarde es momento de comenzar a diseñar e implantar nuevos modelos para la generación de energía. SUNTHEREUM es la propuesta que entendemos se desarrollará durante la década que se inició el año 2020, para terminar la década con procesos de implantación de diferentes pilares de SUNTHEREUM en plena operación iniciando así la era del nuevo paradigma de la energía en el mundo.

Las bases del cambio

Cuando hablamos de cambio de paradigma lo hacemos apoyados por las posibilidades tecnológicas de que disponemos en la actualidad, la necesidad de respetar el entorno para las generaciones presentes y futuras, la obsolescencia de los sistemas actuales con necesidad de renovación, criterios de seguridad y efectividad en las propias redes para dar soporte a la demanda para los próximos años, a la viabilidad económica del modelo actual y especialmente a la cultura de la responsabilidad ciudadana en todo lo que afecta a la herencia que se crea para las próximas generaciones.

Basados en estos criterios entendemos que los Sapiens tenemos la obligación y responsabilidad de comenzar a diseñar e implantar un nuevo modelo antes de que el modelo actual quede colapsado.

La implantación del nuevo paradigma, como aconteció en la historia de la humanidad en las diferentes ocasiones que se han producido cambios en los modelos sociales, religiosos, culturales, económicos, etc., se deberá producir de forma progresiva en el tiempo conviviendo el modelo existente con nuevos estadios ya pertenecientes al nuevo modelo.

Las bases del nuevo modelo se sustentan en el siguiente círculo virtuoso:

·              nuevas tecnologías, de generación, almacenaje, transmisión, seguridad; en

·             nuevas aplicaciones derivadas de las nuevas tecnologías, modelos, y necesidades;

·             nuevos modelos de integración, generación, almacenaje, transporte, distribución, consumo; y

·             nuevas necesidades de uso, convivencia, calentamiento global, crecimiento demográfico y distribución.


Así, las bases del nuevo paradigma se centran en la integración de elementos que van a contribuir a su desarrollo de forma integral y global. Para comprender efectivamente el modelo sugerimos tener en mente una concepción holística del conjunto de bases y sus aplicaciones.

Figura 2 Las bases del circulo virtuoso SUNTHEREUM

Aquí definimos el modelo SUNTHEREUM integrador de las bases de sustentación del nuevo paradigma, compuesto por siete pilares todos ellos existentes en diferentes estadios de maduración, pero con la peculiaridad de ser considerados de forma integral.

Estamos hablando de pilares que algunos son tecnologías actualmente -inicio década de los 20- firmemente consolidadas, otros son modelos de actuación, otros son tecnologías en proceso de consolidación, otros son tecnologías en proceso de diseño, o pruebas muy incipientes que aún no se contemplan como alternativas reales y otro basado en tecnología existente, aunque aplicada de forma totalmente innovadora.

Si bien la consolidación del nuevo paradigma precisará de varias décadas para consolidarse plenamente hacia la mitad del siglo XXI, entendemos que al final de la presente década de los 20 las bases y los pilares que las sustentan estarán en una situación avanzada de desarrollo e implantación, con el ciclo evolutivo consolidado.



[ii] El año 1971 el consumo mundial de energia per capita fué de aproximadamente 1,200kWh, el año de 2014 fué de 3.132kWh, con un crecimiento estimado medio para el futuro de 0,71%. Fuente Banco Mundial. https://datos.bancomundial.org/indicador/EG.USE.ELEC.KH.PC?end=2018&start=1960&view=chart

[iii] “La tercera revolución industrial”, Jeremy Rifkin, 2008